El 94% de los españoles respira aire contaminado

El 94% de los españoles respiró aire contaminado en el 2016, según el informe anual de calidad del aire que presenta Ecologistas en Acción. Además, afirma que el 90% del territorio español estuvo expuesto a niveles de contaminación del aire superiores a los recomendados por la Organización Mundial de la Salud. El aumento del tráfico, el cambio climático, el fraude en las emisiones de los automóviles y la apuesta de los gobiernos por usar energías sucias, en vez de renovables, son los principales responsables de esta situación.

El informe de Ecologistas en Acción analiza los datos recogidos en 700 estaciones oficiales de medición instaladas en todo el territorio español. Gracias a estas, el informe presenta datos exhaustivos de calidad del aire, por comunidades autónomas y por sustancias contaminantes.

El documento fija los ciudadanos que respiraron aire contaminado por encima de los límites legales en 16,9 millones de personas y de estos, la mayor parte se encuentra en Andalucía con 8,4 millones de afectados. Es decir, uno de cada tres españoles respiró aire que infringe los límites que marca la ley. Además, la superficie que estuvo expuesta a una contaminación que daña la vegetación alcanzó los 255.000 kilómetros cuadrados. En otras palabras, la mitad del territorio español se vio afectado por una contaminación superior a los límites legales.

Los principales focos de contaminación son las áreas urbanas, donde se concentra la mayor parte de la población, el tráfico y la industria. Mención aparte merecen los entornos de las grandes centrales termoeléctricas de carbón y otros combustibles fósiles, ya que son estas industrias las que afectan de forma decisiva a la calidad del aire.

En cuanto a los contaminantes, el ozono troposférico presentó los mayores niveles de  extensión y afección a la población, con niveles que incluso se encuentran en alza. Esto se debe al incremento de las temperaturas medias y de las situaciones meteorológicas extremas, olas de calor, durante el verano, como consecuencia del cambio climático. Las partículas PM10 y PM2, 5, el dióxido de nitrógeno NO2 y el dióxido de azufre SO4 en el aire afectan a tres cuartas partes de la población y por tanto, son una seria amenaza para la salud.

A pesar de que Los Planes de Mejora de calidad del Aire y los Planes de Acción a corto plazo son obligatorios, en muchos casos no existen y en otros son inefectivos por falta de voluntad política. Por ejemplo, el Plan Aire del Gobierno central expiró en 2016, y no se ha presentado sustituto.

A pesar de las pocas medidas que toman estado y comunidades, la contaminación del aire debería abordarse como un problema de primer orden. Cada año se registran en España más de 24.000 muertes prematuras por afecciones derivadas de la contaminación del aire, de acuerdo a las cifras publicadas por la Agencia Europea de Medio Ambiente, y los costes derivados de la contaminación en el aire suponen 50.000 millones de dólares al año, un 3,55% del PIB español.

Ante esta situación, las principales vías de actuación para reducir la contaminación son la disminución del tráfico motorizado, la reducción de la necesidad de movilidad, la potenciación del transporte público y el abandono de la generación de energía eléctrica por centrales térmicas, sobre todo las de carbón.

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