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Los médicos rehabilitadores advierten del riesgo de lesión medular por zambullidas imprudentes

Por el 05/08/2019
zambullidas-sermef

La Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (SERMEF), con motivo de los meses estivales, quiere hacer un llamamiento a la prudencia a la ciudadanía ante el riesgo de producirse lesiones medulares por zambullidas al introducirse en un medio acuático como una piscina, el mar, un lago o un río.

SERMEF, insta a toda la población a extremar la precaución y a seguir unas sencillas pautas para prevenir estas lesiones como conocer la profundidad de la superficie acuática y evitar tirarse al agua de cabeza.

Si se lanza de cabeza, siempre se ha de hacer con los brazos y manos por delante en prolongación del cuerpo para proteger la cabeza y cuello ante posibles impactos con el suelo o una roca. También es importante no lanzarse al agua de cabeza desde demasiada altura.

Los médicos rehabilitadores, entre muchas otras patologías, tratan las lesiones medulares, y destacan que se pueden evitar siendo prudentes.

Conocer la profundidad

Desde SERMEF destacan que cuando una persona se lanza en zambullida a una superficie acuática en la que no se conoce la profundidad, hay que asegurarse de cuál es la profundidad. En ríos, lagos o incluso en el mar cuando el agua está turbia y no se ve el fondo puede haber una rama de un árbol o una roca.

Además, se ha de saber que las olas y las corrientes pueden cambiar la profundidad. En las piscinas también hay que tener precaución y cerciorarse de la profundidad, tarea que es mucho más fácil porque está señalado.

Entrar en el agua correctamente

Por otro lado, desde la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física destacan que hay que evitar tirarse de cabeza al agua. Y si se hace, siempre hay que hacerlo con las manos por delante y la cabeza entre los brazos extendidos, de manera que se si se produce un impacto este sea contra los brazos y no contra la cabeza.

En general, desde SERMEF recomiendan introducirse en el agua de forma tranquila y con cuidado, valiéndose de los bordes del perímetro acuático y evitar riesgos lanzándose al agua de cabeza, de pie “estilo palillo” o dando volteretas o giros.

Si ocurre un accidente

1.- Lo primero que hay que hacer cuando ocurre un accidente es sacar a la persona a tierra y ponerle en una superficie rígida. Mover el cuerpo en bloque para que no se produzcan lesiones a nivel del cuello y evitar mover la columna.

2.- Comprobar que puede respirar y si no puede liberar su vía área y ponerle sobre una superficie rígida.

3.- No trasladarle a un centro sanitario en un vehículo particular y llamar a los servicios de emergencia. A veces, durante el traslado las lesiones que son incompletas acaban por hacerse completas.

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