Crisis visible, pedagogía invisible

MARIANA GUZMÁN | Pedagoga con Máster en Programación Neurolingüística y Coaching 

Saturado el mundo entero de información acerca de un virus mortal, tan real como letal, no es de mi interés escribir acerca de él sino de sus regalos.

Nacen en mi interior dos sentimientos, el primero es dolor por cada lágrima derramada frente a la pérdida, ausencia, desesperación, impotencia, angustia. Dolor al reconocer la indolencia y el oportunismo egoísta de algunos por sacar provecho de la situación.

El segundo sentimiento aparece mucho más grande y poderoso, la ALEGRÍA unida al ORGULLO al descubrir la grandeza del SER HUMANO, capaz de empatizar, ayudar, cooperar, solidarizarse y retomarse. Los momentos de crisis traen consigo oportunidades, es tiempo de tomar decisiones y de replantearse nuestras existencias, su sentido y reacomodar las escalas de valores entre muchos otros aprendizajes.

La Pedagogía (ciencia y arte de educar) no sólo es aplicada por los que profesionalmente elegimos ser pedagogos, sino que está presente en casi todos los aspectos de la vida de una persona a cualquier edad, forma parte innata en la transmisión de conocimientos y adecuación al medio en donde se vive. Es por eso que ella también está sufriendo una transformación tan profunda como esta crisis y nos está apuntando nuevos retos que aparecerán después de ella.

Esta situación exige una pronta revisión de los objetivos que hasta hoy hemos tenido para cada aspecto de nuestra vida como puede ser el: FAMILIAR, PAREJA, AMIGOS, ECONÓMICO, SALUD, LABORAL, FORMACIÓN, MOMENTOS DE OCIO, ESCALA DE VALORES. La situación y sus posibles consecuencias nos invitan a reconsiderar si lo que valorábamos como importante lo sigue siendo, si las formas de relacionarnos, comunicarnos, amarnos, de convivencia, de trabajo, de formación y de existir eran las adecuadas y serán las adecuadas para un nuevo ámbito mundial.

Las madres y padres han tenido que involucrarse en los estudios de sus hijos(as), los abuelos han dejado en su mayoría de sustituir los momentos de ausencia de los padres quienes descubren aspectos que no conocían de sus hijos, matrimonios y parejas se replantean su convivencia y encuentran puntos olvidados que enriquecían o les distanciaban y que hoy ponen en juego la permanencia de su relación, vecinos que no se hablaban porque no les interesaba hoy intercambian repostería casera. No es fácil practicar la infidelidad sin ser descubierto, conseguir alguna droga sin ser evidente, ni dejar de discutir cuando el espacio no permite la privacidad, el maltratador(a) sigue ejerciendo violencia aún mayor en el confinamiento, así que es el MOMENTO IDEAL de retomar nuestras vidas y decir ¡¡¡BASTA NI UNA MÁS!!! HOY COMENZARÉ A TEJER MI VIDA DE DIFERENTE MANERA.

La crisis nos REGALA una nueva visión para comprender la vida en su esencia y la posibilidad de reestructurar una nueva, nos da la oportunidad de gestar una nueva realidad y una excelente herramienta que está en esa Pedagogía invisible que se encuentra en la diaria convivencia por ejemplo:

1.-Hoy tenemos que dar las GRACIAS a los jóvenes por ser tan capaces y adelantados en el uso de los teléfonos, computadoras, internet y medios que los de nuestra generación y anteriores no tenemos, nos quejábamos de lo mucho que pasaban horas navegando, en juegos y compras online lo cual hoy agradecemos por que reconocemos que tienen las herramientas para poder seguir estudiando e investigando. También agradecemos que sean capaces de adaptarse a un espacio limitado y de comunicarse con el mundo entero fácilmente e incluso en varios idiomas.

2.-Los docentes se han disfrazado, inventado canciones, ideado cuentos y puesto en escena como los “youtubers” favoritos de nuestros hijos para animarles y captar su atención al impartir un nuevo tema, los ven con ojos de recién levantados, ven sus habitaciones y sus pijamas, conocen a sus familias y sus espacios se han descubierto a sí mismos capaces de comprender a sus alumnos de una forma más personalizada y se han obligado a ser creativos y reinventar su forma de enseñanza, su didáctica ¿quizá más humana? ¿será más personalizada ? En algunos casos sí, en otros es lo contrario, pero la oportunidad está de pie frente a su ética y vocación.

3.-La necesidad de impulsar a los estudiantes a ser autodidactas es uno de los objetivos que se está cumpliendo a marchas forzadas comprendiendo que esto será lo que mejor funcione en el mundo estudiantil y laboral, cambiando el rol del profesor o de jefe, quienes tendrán un papel más orientativo, de supervisión y de catalizadores provocando nuevos aprendizajes y retos en vez de jugar un papel meramente resolutivo y calificativo.

4.-La Pedagogía invisible hace que los abuelos se actualicen en los medios para estar en contacto y hoy logran hacer videollamadas y comprar online como sus nietos. Así que los pequeños se convierten en transmisores de conocimientos y adecuan sus estrategias didácticas para hacer comprender su mundo a los abuelos.

5.-Esa Pedagogía invisible que aparece cuando tenemos que pensar en una solución, cuando la empresa se declara en ERTE o en cierre obligándonos a reacomodar objetivos y presupuestos, a recordar todos los conocimientos, habilidades y capacidades que poseemos, esas que desempolvaremos y pondremos en juego para obtener un nuevo empleo. Será tiempo de nuevas estrategias de comprender que quienes nos entrevisten podrán tener las edades de nuestros hijos o sobrinos y entonces serán las nuevas generaciones quienes nos enseñen a capacitarnos online, a actualizarnos en casa y abrirnos al mundo como ellos lo hacen.

Finalmente hago una llamada a la comunidad educativa removiendo sus cimientos y preguntando ¿qué conocimientos, habilidades y capacidades necesitarán construir nuestros discentes para enfrentar en un futuro varias crisis como ésta o mayores? ¿qué tan importante será enseñar a sembrar, criar, cultivar, aprender a leer los ciclos de la luna y las estrellas? La Pedagogía renovada necesita hablar de la fuerza de la naturaleza del conocimiento de la tierra, del mar, de nuestro cuerpo, de animales, del cielo y de supervivencia. De valores como la cooperación, la disciplina no por el premio ni por la sanción sino por convicción, practicar la compasión, solidaridad, fraternidad, igualdad, respeto, cuidado de la salud y de amor…. sí de AMOR, porque lo único que hace posible una convivencia que suma y no que resta es ese AMOR al planeta, a toda expresión de vida, al prójimo que ríe y llora como tú…… como yo.

Si desea más información puede contactarme: https://mpggj2.wixsite.com/marianaguzman

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